La alcaldesa, Ana González, ha apoyado «frustración» de mucha gente que lo que quiere es trabajar y que tiene incertidumbre sobre si lo va a poder hacer
28 oct 2020 . Actualizado a las 15:19 h.Los hosteleros de Gijón tuvieron que desconvocar la manifestación que tenían programada para este miércoles, aun así han llevado a cabo su protesta «paseando» hasta la Plaza Mayor y el paseo del Muro, donde han realizado una cadena humana, respaldados en algunos momentos del recorrido desde la carretera por vehículos de repartos y sectores afines.
De esta forma, desde el barrio de La Calzada ha bajado un grupo de hosteleros que ha hecho una cadena humana desde la escalera dos a la seis de la playa de San Lorenzo, mientras unas escaleras más allá hacían lo propio hosteleros de la Arena, El Coto y algunos otros barrios.
Ya en la Plaza Mayor, y al grito de dimisión y otros cánticos en defensa de que les dejen trabajar para tener un futuro, en señal de protesta por la merma de ingresos que les está suponiendo todas las restricciones higiénico sanitarias por la pandemia del covid-19, dos portavoces del colectivo han sido recibidos por la alcaldesa, Ana González, a la entrada del Ayuntamiento.
Y si bien desde Delegación de Gobierno se había prohibido la manifestación y limitado la concentración a 175 personas, fueron muchas más las que han participado en la protesta, guardando las distancias de seguridad y medidas higiénicas obligadas, pero sin leer el manifiesto que tenían previsto.
Sentimiento de frustración
González, ha lamentado que hay gente y sectores productivos que generan empleo que lo están pasando mal, uno de ellos el de la hostelería. A su juicio, lo que hoy se ha visto es la «frustración» de mucha gente que lo que quiere es trabajar y que tiene incertidumbre sobre si lo va a poder hacer.
«Ante esto solo cabe ponerse en su piel», ha apuntado, a lo que ha señalado que da «rabia» ver que la gente lo esté pasando así. Es por ello, ha dicho entender que estén en la Plaza Mayor intentando trasladar esos miedos, esa frustración y ese enfado.
Ha incidido en que lo que piden al Ayuntamiento es que les ayude. Algo que ha asegurado que ya hacen, aunque se ha preguntado si deben ser también otras administraciones quienes hagan lo mismo.
Sobre la bajada de impuestos que piden, ha recordado que no se paga la tasa de terrazas, y agua y basura. Es el nivel al que puede llegar el Ayuntamiento, al margen de los cinco millones de euros en ayuda directas para pequeño comercio y hostelería.
De estas, unas 2.500 solicitudes, ha apuntado que se están resolviendo y que espera que a finales de mes se puedan empezar a abonar. «Sí hemos puesto medidas», ha asegurado, a lo que ha indicado que si son suficientes o no tiene que ver con cuánto va a durar esta crisis y con qué medidas hay que evitar el contagio. Sí que ha coincidido con los hosteleros en que no son el virus y se ha mostrado segura de que la mayoría de la Hostelería cumple con las medidas que hay que adoptar.
No demonizar al sector
Dicho esto, ha matizado que el comportamiento que puedan tener algunos clientes es lo que puede hacer que el virus se pueda contagiar. «No se trata de demonizar a un sector», ha dejado claro González, quien ha defendido la profesionalidad del mismo.
La alcaldesa, asimismo, se ha ofrecido a trasladar al Principado las reivindicaciones que le han entregado mediante un escrito. También ha apuntado que el Ayuntamiento está trabajando para que las terrazas de verano se puedan reconvertir a las de otoño/invierno. Eso sí, ha dado por supuesto que habrá establecimientos que por falta de espacio no puedan instalar una terraza, ya que hay que garantizar el paso y hay aceras que son estrechas.
En este sentido, ha asegurado que van a flexibilizar todo lo que puedan, pero con unos límites, los mismos que para el verano, que son que tiene que haber paso para la gente, que sean elementos que no se fijen al suelo y supongan una obra y tienen que ser accesibles, permitiendo el paso de personas con movilidad reducida.
Sobre la enmienda presentada por Foro para bonificar en el IBI a locales de establecimientos hosteleros afectados por la pandemia y que fue rechazada por el voto particular el Gobierno local, ha recalcado que si estaba mal formulada, no es cuestión que la arregle ahora el Ayuntamiento.
A esto ha sumado que la reducción del IBI beneficiará a los dueños de los locales, pero no así a los hosteleros, que la mayoría están de alquiler. «Ocho años de Gobierno dieron muy poco para conocimiento», ha ironizado la alcaldesa sobre si Foro desconocía este hecho.
«Se beneficiaban los grandes grupos que son los dueños de los locales», ha advertido sobre la enmienda de Foro. «Redistribuían el dinero del Ayuntamiento para los grandes grupos», ha añadido.
«No somos el virus»
Por parte de los hosteleros, uno de sus portavoces, Jacobo Méndez, de una agencia de publicidad pero con vínculos con la Hostelería, ha explicado que le han entregado a la alcaldesa un escrito en el que dejan claro que este sector «no es el virus» y que no se niegan a trabajar con todas las medidas sanitarias que se imponen, pero reclaman el derecho a poder seguir trabajando.
Ha señalado, asimismo, que han quedado con la alcaldesa en que puedan trasladarle sus preocupaciones y necesidades. Están valorando incluso el poder recurrir la decisión de Delegación de Gobierno que prohibió la manifestación.
Ha incidido en que los hosteleros siguen pagando las facturas y los impuestos, por lo que piden seguir trabajando. Y si bien son conscientes de que hay una pandemia y la salud es lo primero, quieren evitar que los negocios tengan que ir al cierre.
Ha agradecido la respuesta al llamamiento hecho y ha pedido disculpas por adelantado si han podido causar alguna molestia. Ha destacado que se ha visto una unión del sector, y que han recibido el apoyo de proveedores y otros sectores vinculados, pero también de ciudadanos, informa Europa Press.