Pablo Pérez está a 5 días de acabar contrato con el Sporting y pendiente de Orlegi

Dani Souto / A.V.M.

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Pablo Pérez
Pablo Pérez Real Sporting

El capitán del conjunto rojiblanco cuenta con el visto bueno de Abelardo Fernández

27 jun 2022 . Actualizado a las 23:04 h.

Cinco días. Ese es el tiempo que le queda de contrato a Pablo Pérez con el Real Sporting de Gijón. Mismo margen con el que cuentan otros futbolistas aún sin nuevo destino como Marc Valiente, que apunta a firmar con el Goa FC indio, donde se reencontraría con el ex rojiblanco Álvaro Vázquez, o Berto González, que buscará destino fuera de Gijón. Jean-Sylvain Babin o Borja López, que también finalizaban contrato este día 30, recibieron permiso para adelantar plazos y ya se comprometieron con otros clubes; Alcorcón y Zulte Waregem respectivamente. Sin embargo, el caso del gijonés es diferente al resto.

Siendo uno de los capitanes del equipo -el único que se mantiene en plantilla junto a Diego Mariño-, en el cuerpo técnico se valora positivamente el rol de Pablo Pérez, representando esa "tercera pieza" más polivalente en la delantera, una misión que no es fácil de asumir, especialmente al tratarse de futbolistas con pocos minutos y que pueden generar mal ambiente en el vestuario por ello. Pablo, siempre ha asumido ese rol con profesionalidad tratando de sumar siempre, tenga los minutos que tenga, sin dar problemas de convivencia. Sin embargo, el cambio en la propiedad, que ha congelado todos los movimientos pendientes, jugará ahora un papel determinante en su futuro.

Previo a la llegada de Orlegi, la dirección deportiva encabezada por Javier Rico mantuvo una serie de reuniones con los jugadores para aclarar su situación. Fue ahí cuando se le trasladó a Pablo que las intenciones del club pasaban por buscar un futuro acuerdo, pero quedando supeditado primero a otras operaciones a llevar a cabo en la planificación deportiva. Antes de que el Sporting le hiciera una oferta a Pablo Pérez, la dirección deportiva debía aligerar la carga salarial de la plantilla, por ejemplo con el descarte de Víctor Campuzano, llamado a ocupar esa plaza alternativa por detrás del delantero que se fiche. Una situación que no gustó en el entorno del futbolista dada la gran incertidumbre con la que quedaba marcado.

La intención futura de la dirección deportiva de Javi Rico, tal y como desveló semanas atrás La Voz de Asturias, pasaba por ofrecerle una ampliación por 2 temporadas - que podría ser un año asegurado y otro variable-. La última renovación de Pablo, firmada en julio de 2019 con Miguel Torrecilla al frente de la dirección deportiva, ya tuvo aparejada una reducción salarial al establecerse definitivamente en un rol de revulsivo. El gijonés, que llegaba a Mareo procedente del fútbol base del Inmaculada ya en edad juvenil, sumó con esta 8 temporadas en el primer equipo desde que debutara en mayo de 2014 ante el filial del FC Barcelona.

Todo eso ya es agua pasada. Orlegi se encuentra en plena reconstrucción del organigrama del Real Sporting, trabajando en incorporar más profesionales para la parcela deportiva al ir definiendo la cúpula ejecutiva. Serán ellos, en consenso con Abelardo Fernández, los que busquen solucionar una situación que el futbolista está estirando al máximo dada su voluntad de continuar ligado al club donde creció.

Ahora la carpeta sin solucionar está sobre la mesa de Gerardo García, que estos días ya ha comenzado a trabajar de forma oficiosa en el Sporting, por ejemplo reuniéndose con Javi Rico, más allá del trabajo que haya realizado previamente. Como anécdota, el nuevo gestor deportivo rojiblanco coincidió el sábado con Pablo Pérez en la boda de Jony, lugar de encuentro para muchos futbolistas del club asturiano, así como Abelardo Fernández y otros ex como Carlos Carmona y Sergio Álvarez.