La medida requeriría declarar el estado de alarma: los expertos creen que las autonomías no tienen capacidad

¿Es posible un toque de queda en Asturias? El Gobierno central reiteró hoy la gravedad de la situación actual de la pandemia por medio de su ministra portavoz y del titular de Sanidad: «Nos encontramos en un momento decisivo», introdujo la portavoz, María Jesús Montero. «La segunda ola ya no es una amenaza, es una realidad en toda Europa», confirmó el ministro Illa. El titular de Sanidad subrayó la gravedad de la situación y expuso que solo hay dos claves para frenarla: «Reducir la movilidad y reducir los contactos personales de cada uno. Y es mejor que eso lo hagamos con el esfuerzo de todos que con limitaciones legales».

Illa se refirió a la posibilidad de usar el recurso del toque de queda como han hecho en otros países europeos explicando que no podría llevarse a cabo sin decretar un estado de alarma y señalando que, para ello, habría que explorar el apoyo de otros grupos políticos ya que, entiende, no sería una cuestión para aplicar solo durante 15 días. En cualquier caso, Salvador Illa afirmó que el toque de queda era algo que estaba en el debate pero en ningún caso decidido. «No contemplamos la posibilidad de un mando único», reiteró el ministro, que descartó también prorrogar el estado de alarma en Madrid, que decaerá el próximo sábado, después de 21 días y con resultados positivos ya que la incidencia de la infección ha descendido sustancialmente en este período: «El Gobierno no quiere sustituir a ninguna Administración, sino coordinarlas a todos, porque nos necesitamos unos a otros».

El inicio del debate que puede llegar a Asturias parte de la Comunidad de Madrid, que está estudiando si pedir al Gobierno central que decrete el toque de queda, que permitiría que no existiese ningún movimiento en determinadas horas del día. Una decisión que «no sería de aplicación solo en Madrid», según ha avanzado el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero. Esta iniciativa la pusieron sobre la mesa los colegios profesionales en una reunión con la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso. «Para eso hay que tener una cobertura legal que no tiene la comunidad autónoma. Tendría que ser una decisión del Gobierno de España. Es una decisión que nosotros tampoco veríamos mal», ha declarado.

En Asturias, el presidente regional, Adrián Barbón, confirmaba ayer a través de sus redes sociales que se está estudiando. El jueves se cumplirá la primera semana de vigencia de la Fase 2 modificada y será ese momento el primer alto en el camino tras siete días para hacer balance los primeros efectos; será en una reunión del Principado con la Delegación del Gobierno y los ayuntamientos. El objetivo a quince días es rebajar la tasa de incidencia del coronavirus en Asturias cien casos por cada 100.000 habitantes. No será fácil, actualmente, según afirmó el presidente asturiano Adrián Barbón, la comunidad tiene una tasa de 247, la media de España está en 312 y hay comunidades que superan los mil. Barbón siempre ha repetido que será contundente en la toma de decisiones en el caso de que el repunte no remita, incluso con la petición del estado de alarma al Gobierno central. Nada se puede descartar. La duda razonable es si Asturias por sí misma tiene capacidad para imponer un toque de queda.

Al otro lado de las fronteras asturianas, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, ha abogado por determinar «qué se entiende por toque de queda», si limitar actividades concretas durante un tiempo o impedir la movilidad absoluta de ciudadanos- El presidente gallego ha considerado que puede ser «una buena medida» el cierre de determinadas actividades entre unas horas concretas, algo que ya se está aplicando en algunos lugares, en función de la incidencia de casos, entre otros parámetros. Sin embargo, ha mostrado sus «dudas» sobre la capacidad de una autonomía para impedir que los ciudadanos salgan a la calle, por lo que ha abogado por «parámetros claros» y por una ley «específica» que avale a las comunidades a actuar frente a la pandemia. «No hay ningún lugar en España donde se esté prohibiendo salir a la calle a partir de las 12 de la noche. Y tengo dudas, además, de que una comunidad autónoma tenga competencias para hacerlo. Sin legislación (específica) imagínese cómo está el país: o estado de alarma o medidas de salud pública, no hay otras posibilidades», ha advertido Núñez Feijoo.

Expertos en Derecho Constitucional y Contencioso-Administrativo consultados por Europa Press defienden que para establecer un toque de queda, como ha planteado solicitar la Comunidad de Madrid al Gobierno central, sería necesario decretar un nuevo estado de alarma debido a que se trata de una medida que restringe derechos fundamentales de parte de la población, como es la libertad de movimientos.

Catedráticos en Derecho Constitucional han afirmado que esta medida tiene encaje jurídico en un estado de alarma y que la competencia para decretar tal situación, como se viene viendo desde el pasado mes de marzo, cuando se aprobó para todo el país por la pandemia del coronavirus y que se prorrogó hasta en seis ocasiones o el decretado el pasado 9 de octubre en Madrid y varios municipios madrileños, es del Ejecutivo y no de una comunidad autónoma.